Sustituye la lechuga de siempre por otras bases para tu ensalada.
Puedes hacerla con arroz, un poquito de curry, daditos de jamón y guisantes, o garbanzos con cebolla y aliño de limón y menta.
Otra opción es usar una lata de habitas, maíz, unos daditos de tomate y un aliño de aceite, sal y pimienta negra molida. ¡Prepárala cómo más te guste!.