En algunas ocasiones, solemos quejarnos sobre si estamos un poquito rellenitas o que tenemos algún que otro michelín, pero lo cierto es que eso es algo que deberíamos de dejar de hacer inmediatamente.
Tenemos que empezar a valorarnos como somos y si nos apetece cambiar algo, podemos empezar a hacerlo haciendo un poquito de ejercicio y una vida más sana.
La gran mayoría de las veces, los chicos prefieren que las chicas dejemos de obsesionarnos con las calorías y disfrutes de un plato delicioso sin ponerle ninguna pega, por no hablar de las tapitas o las cervecitas... ¡Vivas las mujeres que saben disfrutar de los placeres de la vida!.