Oler la comida ENGORDA, la ciencia lo confirma
Los aromas forman parte de la magia, son una de las razones por las que nos gusta tanto cocinar y comer, además de una de las pocas cosas que podemos disfrutar en abundancia sin ningún riesgo para nuestra salud ni para nuestra figura.
Hasta ahora. Porque los científicos nos vuelven a traer una muy mala noticia: el simple hecho de oler comida engorda ya que, aparentemente, existe una relación entre lo que percibimos a través de nuestro sentido del olfato y los procesos metabólicos de nuestro organismo.
Este estudio realizado en la Universidad de Berkeley utilizó dos grupos de ratones, unos a los que se les había reducido su capacidad olfativa y otros perfectamente normales que la conservaron intacta. “Después de que los investigadores eliminaran temporalmente el sentido del olfato en el ratón de abajo, permaneció en un peso normal mientras comía una dieta rica en grasas. El ratón en la parte de arriba, que conservó su sentido del olfato, aumentó de peso en la misma dieta alta en grasa”. Los resultados fueron demoledores: los que no podían oler tan solo aumentaron de peso en un 10% mientras que el resto prácticamente dobló su masa corporal.
Según Céline Riera, ex becaria postdoctoral de la Universidad, “las personas con trastornos alimenticios a veces tienen dificultades para controlar la cantidad de comida que están comiendo y tienen muchos antojos. Creemos que las neuronas olfativas son muy importantes para controlar el placer de los alimentos y, si tenemos una manera de modular esta vía, podríamos ser capaces de bloquear los antojos en estas personas y ayudarles a controlar su ingesta de alimentos”.
Cabe decir igualmente que, mientras este estudio no sea llevado a cabo en humanos, no tendremos pruebas definitivas al respecto. Así pues, y hasta nueva orden, ¡disfruta de los sabores y olores de tu comida!
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